Pedro es el encargado de una cuadrilla de limpieza que pertenece a una gran empresa del sector.
Todos los días, la cuadrilla dirigida por Pedro debe encargarse de limpiar varios locales de oficinas. Pedro dice no querer problemas y deja en manos del equipo que se reparta el trabajo como considere oportuno.
Juan, un trabajador veterano, a regañadientes, de alguna forma, asume cierta coordinación de ese reparto que siempre termina favoreciendo los intereses de los trabajadores con más años en la empresa.
El equipo se resiente de esta dinámica. Hay mal ambiente y son frecuentes los enfrentamientos entre trabajadores muchas veces por cuestiones aparentemente insignificantes. Particularmente, Juan está enfadado por realizar una tarea que le genera problemas y no está remunerada. Por su personalidad, tampoco encuentra la forma de "desprenderse" de este rol de liderazgo informal.
Pedro ha encontrado una "estrategia" para no asumir la responsabilidad, y los problemas que conlleva, propia de su cargo. A corto plazo, es posible que funcione o, al menos, parezca que funciona. Sin embargo, a largo plazo, esta decisión no sale "gratis" ya que genera un malestar en el equipo que terminará afectando a su eficacia.